Mi cumpleaños en el Monte Fuji
'La Gran Ola’ es probablemente la obra de arte japonesa más conocida y emblemática, famosa en el mundo entero. Representa el momento en el que una ola gigante está a punto de engullir tres barcos pesqueros con sus tripulaciones. En el horizonte, el icónico Monte Fuji contempla impasible la colosal embestida del mar contra el hombre.
'La Gran Ola', de Katsushika Hokusai (British Museum).
También llamada 'La Gran Ola de Kanagawa’, es una estampa de Katsushika Hokusai (1760-1849), célebre pintor de estilo ukiyo-e, y fue publicada entre 1830 y 1833, durante el periodo Edo de la historia de Japón. Su autor tenía alrededor de setenta años cuando la pintó, dentro de su serie Treinta y seis vistas del monte Fuji. Está realizada mediante la técnica de grabado sobre madera, en color, y de ella se realizaron miles de impresiones, cada una de las cuales se vendió a un precio ridículamente bajo.
UNA DE LAS IMÁGENES MÁS FAMOSAS
Cuando se publicó, alrededor de 1830, el contacto de Japón con el mundo exterior estaba estrictamente regulado. Hubo que esperar hasta 1859, cuando el país, bajo la presión de Estados Unidos y otras potencias, abrió algunos de sus puertos, para que las estampas japonesas llegaran a Europa.
Artistas, coleccionistas, marchantes, ciudadanos, aristócratas y casas reales cayeron instantáneamente enamorados del arte japonés, cuyo influjo llegó en seguida hasta Estados Unidos. Whistler, Van Gogh y Monet copiaron y realizaron obras de inspiración nipona, y La Gran Ola inspiró los bocetos sinfónicos de Debussy para El mar.
EL MONTE FUJI, SAGRADO Y MÁGICO
La Gran Ola es, en realidad, una vista del Monte Fuji, considerado sagrado, y de hecho, los compradores originales de la estampa de Hokusai en el siglo XIX eran personas comunes y corrientes que practicaban el culto al Fuji.
El Monte Fuji, visto desde Hakone. |
Durante la era Edo, se realizaban peregrinaciones en grupo al monte sagrado para escalar la montaña, si bien solamente a los hombres se les permitía llegar a la cima del Fuji en aquellos tiempos.
Mi cumpleaños en el Monte Fuji (20-08-2017), a 2.305 metros de altura.
El Fuji es la montaña más alta de Japón, pero en el grabado de Hokusai queda relegado en la distancia, eclipsado por la ola gigantesca en primer plano. Como una broma visual, las gotas de agua que esparce la ola parecen ser nieve que cae sobre la cumbre del monte. Se trata de una obra con una composición supuestamente racional, pero más allá del inmediato primer plano, la escena se torna dramática y emocionante.
Monte Fuji en 2017 (5º estación, 2305 metros de altitud). Al fondo, la cima.
El editor de La Gran Ola, Nishimuraya, ordenó que sus artesanos hicieran miles de impresiones del grabado a partir de conjuntos de bloques de madera; se cree que salieron a la venta entre 5.000 y 8.000 copias.
El British Museum de Londres es dueño de una excelente impresión inicial, que pese a estar algo descolorida, es muy nítida y fresca. Se puede ver un patrón de vetas de madera único en el cielo negro, a ambos lados del Monte Fuji, con vestigios de una nube rosa en la cima.
Con esta imagen icónica, cierro estos Cúmulos y limbos de 2023, os emplazo a seguir leyéndonos en 2024, y os deseo un magnífico ¡Feliz Año Nuevo!
¡Feliz 2024!
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