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Tras muchos años de restauración, acaba de abrir sus puertas la Montaña Artificial del Retiro de Madrid, un edificio singular, uno de los caprichos románticos que el rey Fernando VII promovió en este parque, en una zona que reservó para su disfrute y el de su familia. Su nombre oficial es Montaña Artificial, pero también se la conoce como Montaña de los Gatos.
Esta pintoresca y peculiar montaña es obra del arquitecto real Isidro González Velázquez, se empezó a edificar en 1817 y se diseñó con el aspecto de un montículo natural. El proyecto original contenía un templete sobre la cima, pero fue eliminado para dejar espacio para contemplar el paisaje circundante.
Vista desde el interior, luce una espectacular bóveda, pero desde el exterior del edificio, la cúpula no se ve, permanece bajo una cubierta de tierra y de un manto vegetal verde. Esta gran bóveda es de ladrillo y muro mixto, de unos 14 metros de diámetro y 15 de altura. Se diseñó para cubrir una noria, aprovechándose la cima para colocar el templete ya desaparecido, del que solo se conserva la base.
El extinto templete era muy curioso, de aspecto oriental y configurado por tres torres (una central, de planta octogonal, y dos cilíndricas en los extremos), unidas por una arquería.
Acceso a la cima de la Montaña Artificial (El Retiro, Madrid). |
A la cima de la Montaña Artificial se llega mediante dos estrechos senderos (en origen estaban limitados por altas empalizadas de madera). A los pies había una ría, un estanque (alguna vez tuvo peces y gansos) y varias cascadas.
Estanque de la Montaña Artificial (Monleón, 1878). |
Tal y como la describía Pascual Madoz, en su diccionario de 1847, este pintoresco edificio estaba todo el año “cubierto de yerbas y arbustos", mientras que en la ría había "peces, gansos y patos". Hoy día, las cascadas se conservan, y la principal aparece dominada en su parte superior por la estatua de un león de yeso.
INTERIOR Y RESTAURACIÓN
Al interior de la montaña se accede por una fachada con tres vanos entre contrafuertes, reformada en 1980. La puerta principal conduce hasta el centro de la cúpula, por un pasillo cubierto de bóveda de cañón. Sobre este, a su vez, corre otro pasillo, abierto a una terraza sobre el acceso.
Fachada actual de la Montaña Artificial del Retiro, en Madrid. |
En los años finales del siglo XX, toda la estructura de esta pintoresca montaña estaba muy deteriorada, y se empleaba para guardar leña y como vestuario para el personal del parque.
En 1987 se renovó de manera parcial, mediante la apertura de una sala de exposiciones, pero tan solo unos años más tarde tuvo que ser clausurada, debido a unas peligrosas humedades.
Cerrada de nuevo, ha habido que esperar hasta 2023 para que recupere su esplendor, tras una restauración integral del interior y del exterior.
Pero qué bonita queda verdad, esta llamada Montaña del Retiro, que ciertamente fue creada por el capricho de un rey, y para diversión del mismo.
ResponderEliminarPero qué más da, digo yo, si de todas formas el propio Parque del Retiro entero, ya desde su mismo origen, fue creado exclusivamente por, y para el uso de un rey, y hubieron de pasar más de cien años, en que otro rey permitió el acceso del público en general dentro del Parque del Retiro, para disfrute del parque para las personas.
Y a la fecha actual, en este año 2023 qué bonito queda el Parque del Retiro en la capital de España Madrid.