Mis poemas 'Personaje' y 'Melocotonero' en 'Poesía de la Esperanza III'

[Poemas que empiezan (Cielo espejo...) y acaban (A ras de cielo) en el cielo]

(Mi contribución a Poesía de la Esperanza II)

Este año he vuelto a participar en el libro colectivo Poesía de la Esperanza, que en 2020 cumple su tercera edición, junto a otros 110 poetas de veinte países unidos por el amor a la poesía sencilla, humilde, imperfecta, libre y popular. Todos nosotros guiados por el hilo conductor de la paz, la ilusión, la alegría, la emoción y ¡la vida! como valores. 

Mi poema 'Personaje', en el volumen III de 'Poesía de la Esperanza'.

Un libro seguramente muy imperfecto y carne de fugacidad, pero repleto de textos que destilan la ilusión de quienes tratamos de cultivar versos en una tierra no siempre fértil, al contrario, en tierra plagada la mayoría de las veces de rastrojos y hierbajos. Y, sin embargo, seguimos obstinados cavando, abonando y sembrando, porque la poesía nos ilumina, edifica y sostiene, nos reconstruye y nos obliga a salir del sótano hacia la luz.

'Tiembla la flor del melocotonero' (Pepa Montero, 'Poesía de la Esperanza III')

La inmensa mayoría de los trabajos incluidos en el libro Poesía de la Esperanza III están libres de cortapisas, métricas o rimas. Son versos que brotan en cascada y fluyen libres, bravíos, rebosantes de savia nueva, con la fuerza de un recién nacido que estrena pulmones. 

Comparto espacio, por segundo año consecutivo, con el periodista y poeta Luis Fermín Moreno (@fathermarch), autor del poemario En ángulo muerto (Biblioteca de Autores Manchegos, 2019),  que participa con los poemas inéditos Hoy he decidido no hacer nada y He visto la sombra azul, cuya lectura demuestra que la brevedad y la concisión pueden ser tan cortantes como la más afilada hoz de cobre y hierro.

Poemas de Luis Fermín Moreno en 'Poesía de la Esperanza III'.

Haciendo un compendio de los tres años de vida de Poesía de la Esperanza, habría que decir que los tres volúmenes son hijos de las redes sociales y han dado cobijo a las creaciones de cientos de poetas de más de veinte países. La iniciativa surgió en 2017, en una página de Facebook, alrededor de dos palabras: poesía y esperanza. La página se llama, por supuesto, Poesía de la Esperanza, y su artífice  es el periodista madrileño Miguel Ángel García Barbero, autor de libros con títulos tan sugerentes como Segovianos árboles o Cartas de esperanza. 

En 2020, como en 2017, personas con espíritu creativo, inquietos creadores de España, Argentina, México, Cuba, Costa Rica, Colombia, Marruecos, Uruguay, El Salvador, Chile, Puerto Rico, Italia, Nicaragua... intercambiamos nuestros cromos de alegría por otras estampitas rebosantes de emoción y, por supuesto, de esperanza.