(Más sobre Jane Austen y The Travel Bookshop aquí)
Ahora que estoy a punto de irme de
vacaciones, y echando cuentas del tiempo, constato que hace ya tres años largos
que empecé este blog y, por tanto, más de tres años que viví en Londres una de
las etapas sin duda más felices y fructíferas de mi existencia.
, el British Museum o el Victoria & Albert, donde
ahora mismo celebran una gran exposición sobre David Bowie.
De
la brevedad de la vida es un célebre ensayo de Séneca (4
a.C.-65 d.C) que, como casi todos los que tenemos formación
universitaria, no he leído y del que sólo conozco lo que aprendí en mi etapa de
bachiller y lo que dicen las reseñas. Sin embargo, pocas certezas como ésta
(descontando la de la muerte) son tan universales e inherentes al ser humano.
![]() |
Interior de la librería original 'The Travel Bookshop' (Notting Hill, Londres). |
Más de tres años hace, por ejemplo, de mi viaje
relámpago Londres-Lille-Londres, ida y vuelta
en el mismo día, para conocer la ciudad medievo-renacentista de los beffroi. Y más de tres años también que peregriné a los
santos lugares donde vivió, escribió y murió la novelista del XVIII
Jane Austen, desde su casa-museo en Chawton, que
visitaba por segunda vez, a las ciudades de Bath y Winchester, que conocía asimismo de antes y que me encantó
recorrer de nuevo, en el verano de 2010.
Y, aunque me parezcan mentira las
largas zancadas que da el tiempo para dejar atrás nuestros sueños, también hace
más de tres veranos que me deleitaba recorriendo las
salas de la National Gallery, la Portrait Gallery![]() |
Fachada de la original 'The Travel Bookshop' (Londres, verano de 2010). |
Todos esos museos, gratuitos, siguen
teniendo al menos dos visitas guiadas (también gratis) cada día, normalmente capitaneadas
por jubilados voluntarios, que desgranan la historia del museo, sus obras más
célebres, curiosidades y detalles que sólo un amante del arte se empeña en
transmitir a los demás. Todo un lujo en estos tiempos de crisis.
Tres años hace ya, en fin, desde que pasaba las
mañanas de los domingos deambulando entre los puestos y la gente en los mercados
de Londres, desde Candem Town a Brick Lane o Peticoat Lane, y mi favorito,
Notting Hill, donde aún existía la
original The Travel Bookshop. La tienda
que ahora ocupa su lugar, más pequeña que la anterior, poco tiene que ver con
la famosa librería de Hugh Grant en la película Notting Hill, donde conoció a Julia Roberts y se fraguó ese amor…
de película.![]() |
Gente en Notting Hill, una mañana de domingo de julio de 2010. |
Los dueños actuales han intentado mantener
el escaparate lo más parecido al original, y en la fachada hay una placa con la historia de la librería. Pero las fotos no engañan, y no hay comparación que empañe la solera de la tienda anterior, donde se respiraba el amor a los libros de viajes. Por mucho que el tiempo nos vaya echando en el olvido, siempre quedarán las gentes y los lugares incrustados en la memoria, en las películas y (como el breve de Séneca) en los libros.
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